Te adiviné en un sueño

Te adiviné en un sueño

era como un vendaval

en el vuelo de unas aves

agitadas al rumor

que desvanecía el viento.

Donde el aterido trazo

idóneo de mi mano,

dibujaba grafías de amor

en los bordes del cielo.

Sabía que te incluiría

en un pensil perfumado

donde los trémolos

en danza de epigramas

eran zarabandas

al titilo de mis versos.

Un follaje ornamentado

entre la pasión de unas letras

y su llamado edénico.

Todo era como ventura

de un iris mensajero,

todo era inmenso,profundo

como la ternura de sus ecos

sin modificar el sentimiento;

así surgía del inconsciente

apasionadas vivencias

con tatuajes incrustados a fuego.

Hoy,me ofrezco en melodías,

así abren mis brazos

como móviles bailistas

esperándote en mis lazos

con aroma de florista

entre seda de hilos flavos

con suspiros de Afrodita.

Elen Lackner