Amor y cláusulas vivas







Acomodo mi entorno vacío,
con simientes de primaveras,
corolas soleadas, matices del iris;
vahos en lumbres y mirras,
templo de tus encantos,
lar que atempera los sentidos.
Contiene albura de adelfas,
el crespo plumaje del ibis;
tonos de una bella melodía,
jaspeados del amaranto,
fulgor de un capuz coralino.
Seducen cual audaz florilegio
las estrofas con cláusulas vivas,
tonadas duales, entre un canto al amor,
y alogamias forjando el destino.
Quiero expresar en la música
como en tus brazos me siento,
son acordes  fuertes y débiles;
una veta de romance sin palabras 
el idioma que mueve mis manos,
la pasión, hundiendo las teclas
ligadura, columpio de líricas,
transporte entre timbales y salvas.
Cordales sostenidos, variaciones
con asonancias y disloques tiernos,
glisado en marfil de bemoles,
pentagrama entre negras y blancas. 
Suave nocturno de dominantes,
curvas donde extraño tus suspiros, 
trae en sus cadencias,
el sonido de una lágrima;
rueda por mis labios, no se detiene,
fluye con gemidos y lloros de Medea. 




Composición musical
y
piano
 de
Elen Lackner